Alejandra Caldera es una joven empresaria que se ha destacado por la propuesta de su restaurante Devoralia. En su misión por ayudar a los demás hizo una publicación en Facebook en la que se comprometió a donar parte de todo lo que se recaudaría durante la apertura de su segundo restaurante en Mexicali.
De ahí surgió la idea de hacer una alianza para que, a través de Fundación Nicoya, se pudiera apoyar a una casa hogar. La casa seleccionada fue Fratello por la Infancia que cuenta con 17 niños. Así que Alejanda acude todas las semanas a dejar el alimento pero también a convivir y a jugar con los niños.
Y, por si fuera poco, Devoralia también hizo alianza con Casa Hogar Buen Pastor para que durante el mes de diciembre los deliciosos buñuelos y las galletas que elabora la Madre Teresa y todo su equipo se vendieran en el restaurante.
De esta manera es como las sinergias estratégicas tienen un gran sentido y un valor inconmensurable para las casa hogar.
